Pequeño, matón y enchufado

En otros tiempos puede que incluso Paul Castellano, uno de los mafiosos más famosos de Brooklyn y miembro del clan Gambino, se hubiese paseado o huido de los ‘Intocables’ de Elliot Ness al volante de un Smart ForTwo Electric Drive.

Pero hoy en día circular al volante del más pequeño de los coches actúales impulsado por energía eléctrica por el barrio más populoso de New York, resulta un ejercicio de relajación después de sufrir el intenso tráfico de Manhattan.

En 2007, la primera versión del Smart ForTwo tuvo su versión eléctrica en forma de 100 unidades que utilizadas por diferentes administraciones locales empezaron a acumular datos y más datos en el intenso tráfico de la ciudad de Londres, aportando un importante ‘feedback’ para las nuevas generaciones.

Apenas un año después se presentaba la nueva versión del Smart ForTwo tras una década de éxito comercial, así como un nuevo desarrollo de vehículo eléctrico sobre el mismo basado esta vez en el empleo de una batería de ion-litio.

En noviembre de 2009 se inició en la fábrica de Hambach (Francia) la producción de 1.000 unidades para su distribución en varias ciudades europeas, incluida Madrid, que al final han terminado ampliándose a 1.500, de las que un cuarto de millar circularán por Estados Unidos, un país donde el primer Smart no pudo ser homologado por longitud insuficiente.