UN PAIS EN LLAMAS

Aunque consciente de mis limitaciones literarías, quiero compartir con todos mi punto de vista sobre la desgracia que vive hoy por hoy Venezuela. Desgracia tan inverosímil que no puedes entender sino la vives y que solo tratan de taparlas los descerebrados cardenales, esto lo digo por el color.

Estoy sentado viendo las informaciones, escuchando testimoniales de todo lo que ocurre y no puedo dejar de pensar como pueden existir Venezolanos tan apátridas que ven como matan, secuestran ultrajan a sus semejantes y todavía dicen que todo marcha bien rumbo al socialismo. Un rumbo que se esta llevando por el medio a la industria nacional, la empresa privada, medios de comunicación y las libertades más fundamentales de cualquier ciudadano llevándonos a una sociedad enferma y destruyendo el capital social . Ahora bien, lo lamentable de todo esto es la ligereza conque los venezolanos bueno debo decir algunos venezolanos ven arder el país en llamas y en vez de buscar agua para apagar el fuego salen y se esconden solo para defender lo suyo, esta actitud es la que contribuye a avivar las llamas que consumen a Venezuela en manos de estos incendiarios Rojos Rojitos.

Por donde mires, te encuentras podredumbre, descomposición, violencia y tiranía en un país que si bien tenia sus defectos siempre se caracterizo por ser un lugar de camaradería, pricipios y alegria. No hace mucho siguieron apareciendo comida descompuesta, bueno toneladas de comida que bastante falta a los venezolanos que no pertenecen a la Boliburgesia, ni viajan a Europa a ver artistas Imperialistas y el único maletín que cargan es con papeles de la oficina si es que tiene la suerte de tener una o empleo. Donde acude el venezolano de a pie cuando es victima de una agregación? Solo nos queda acudir a la iglesia a pedir a dios, por lo menos por ahora eso aun se puede, pero si le joden un hijo a un miembro de la alta esfera otro gallo canta y peor aun te advierten que con sus hijos no te metas, seguro cuentan mas que los de uno. Que dios nos libre de esto cerebros inocuos que ocupan tan importantes puestos.